Timberland -una de las marcas de moda y calzado más preocupadas por la sostenibilidad– ha anunciado que se propone que sus productos tengan un impacto positivo para el medio ambiente como máximo en 2030. Este objetivo se concreta en dos metas:
- Que todos sus artículos sean diseñados de acuerdo con los principios de la circularidad, y que por lo tanto no generen ningún tipo de desechos.
- Que para esa misma fecha todas sus materias primas naturales procedan de agricultura regenerativa y tengan por lo tanto un impacto positivo en la naturaleza.
“Hoy en día el medio ambiente está degradado. Como fabricantes de calzado y confección, somos parte del problema”, reconoce Colleen Vien, directora de sostenibilidad de Timberland.
Y agregó: “Durante décadas, hemos trabajado para minimizar nuestro impacto, pero ya es hora de que seamos más ambiciosos. Imaginen una bota que devuelve más carbón a la naturaleza que el que emitió su proceso de producción”.
Además, asegura que la firma se enfoca en la circularidad y a la “agricultura regenerativa“, para llegar a tener un impacto positivo e ir “más allá de la mera sostenibilidad, ayudar a la naturaleza a expandirse”: “Estamos expectante antes este nuevo derrotero. Esperamos inspirar a todo el sector para que trabaje junto y cambie a mejor nuestro futuro colectivo”.
Circularidad de los productos
Para emular el proceso closed-loop de la naturaleza, Timberland quiere que todos sus productos (calzado, confección y accesorios) estén diseñados para la circularidad.
La bota Earthkeepers, lanzada en 2007, ya estaba fabricada con un forro interior de PET reciclado y con suelas de caucho reciclado.
En 2010 lanzó la segunda bota Earthkeepers, diseñada para poder ser desmontada y reciclada por completo al final de su vida útil.
Ahora, Timberland va más allá. Quiere que en 2030 todos los materiales usados en sus productos sean desmontables y reciclables.
Agricultura regenerativa
Actualmente ya hay bastantes empresas que desean que todos sus materiales e ingredientes sean producidos de acuerdo con los principios de la agricultura regenerativa, para asegurar la regeneración de la salud del suelo y su capacidad para retener el carbón.
Como miembro fundador del Leather Working Group en 2005 Timberland lideró el camino para mejorar la producción y el aprovisionamiento en el sector del cuero, que ayudó a mejorar las prácticas de curtición en todo el mundo.
En 2019 estuvo entre las marcas que financiaron la investigación sobre la agricultura regenerativa. Desde entonces ha trabajado con el Savory Institute y con proveedores como Other Half Processing y Thousand Hills Lifetime para conseguir pieles y subproductos de la curtición de animales criados orgánica y sosteniblemente, sobre todo en Estados Unidos, Australia y Brasil.
Este otoño reintroducirá su plataforma Earthkeepers como testimonio de su compromiso con la sostenibilidad. Lanzará su primera colección de botas realizadas con curtidos regenerativos proporcionados por Thousand Hills y Other Half Processing, que espera ampliar en las próximas temporadas.
Timberland está trabajando también para crear cadenas de suministro regenerativo en caucho, algodón, lana y caña de azúcar.
Fuente: Ecosustentable/Indumentariaonline