El mundo textil y el cambio climático son dos mundos que hay que unir
Llegamos a la declaración de crisis global. El Acuerdo de París, de 2015, estableció que el límite de seguridad dentro de la crisis climática actual en 1,5 grados y 2 grados.
La alerta es permanente, los expertos del IPCC avisan de que ya se han causado cambios que serán “irreversibles”. El secretario general de la ONU asegura que este estudio es “un código rojo” para el mundo. La urgencia del cambio de modelos de producción y (agrego yo de consumo), le dan una oportunidad a los gobiernos nacionales y provinciales a plantear reducciones “rápidas, sostenidas y a gran escala” para quedarse en los 1,5 grados hacen falta. Las políticas públicas deben presenta de manera urgente serios planes de mitigación y adaptación al cambio climático. Pero, ¿qué ocurre en el sector textil y en toda su cadena de producción y post servicio?
El poder de la industria textil radica sencillamente en el hecho de que “todos” nos vestimos, pero además “vestimos” y elaboramos con productos textiles un sin número de elementos y productos que rodena las actividades humanas. La huella ecológica que genera es exponencial y directamente relacionada a el crecimiento de la población.
De acuerdo con la Conferencia de la ONU sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), la industria de la moda es la segunda más contaminante del mundo. La sobre explotación de los recursos naturales que utiliza este sector, contribuyen altamente al cambio climático. Repasemos algunos factores:
Según las Naciones Unidas la “Confeccionar unos jeans requiere unos 7500 litros de agua, el equivalente a la cantidad de ese líquido vital que bebe una persona promedio en siete años. Ese es sólo uno de los varios hallazgos alarmantes de un estudio ambiental reciente que revela que el costo de estar siempre a la moda es mucho más caro que el precio monetario que pagamos por ello.”[1]
Siguiendo con este enfoque la UN ha realizado estudios que arrojan los siguientes guarismos:
- Se requieren 7500 litros de agua para producir unos jeans
- El sector del vestido usa 93.000 millones de metros cúbicos de agua cada año, una cantidad suficiente para que sobrevivan 5 millones de personas
- La industria de la moda es responsable del 20% del desperdicio total de agua a nivel global
- La producción de ropa y calzado produce el 8% de los gases de efecto invernadero
- Cada segundo se entierra o quema una cantidad de textiles equivalente a un camión de basura
- La producción de ropa se duplicó entre 2000 y 2014
Estas conclusiones nos acercan a la idea que planteamos respecto del acercamiento de los “Dos Mundos”. El mundo de la industria textil que requiere como insumo gran parte de los recursos naturales, desde el uso del suelo para los cultivos de algodón, lino, yute y rafia u otras fibras, este uso implica el recurso agua, y los agroquímicos para sus cultivos, hasta el agua de procesos tanto en la producción como en el servicio de lavado. La energía convencional que se emplea en la logística, siendo el transporte marítimo el que aporta mayores cantidades de emisiones contaminantes tanto a la atmosfera como a los mares y océanos. Adicionalmente las sustancias químicas que se emplean el a confección de telas, aditivos y colorantes las cuales a su vez forman una cadena de dilapidación de recursos no renovables.
Otra de los ejes a tratar es la generación de residuos en todas las etapas que aporta gran cantidad de impactos negativos con-causales del cambio climático. En ese sentido en Europa son varias las propuestas del sector textil y del calzado se han enfocado en la sostenibilidad y el ecologismo incluyendo la economía circular como sus políticas de desarrollo.
Un estudio publicado recientemente en la revista científica Nature Reviews Earth & Environment indica que “los textiles, junto con el aluminio, generan la mayor cantidad de gases de efecto invernadero por unidad de material. De hecho, la industria de la moda es responsable del 10% de las emisiones mundiales. No solo eso, los impactos de la industria textil -sobre todo aquella relacionada a la “moda rápida”- se traducen en más de 92 millones de toneladas de desechos producidos por año y 1,5 billones de litros de agua consumidos.”
Todo indica que los patrones de producción y consumo deben ser re visionados de manera urgente. Tomando conciencia de la relación que existe entre el sector y sus consecuencias en el clima, estamos achicando la brecha.
Fuente: Revista Multiservicios para Indumentaria Online
Foto: Felpudo Rent