El entorno emprendedor tiene al frente de los sectores de la moda y el calzado retos y oportunidades con las que trabajar. Los nuevos modos de producción, materiales, el reto de la sostenibilidad y del uso de materiales reciclables son algunos de los puntos varios protagonistas del sector en la jornada «Las startups en moda y calzado: la era de los nuevos materiales» organizada por el Parque Científico de la UMH.
De este modo, Gabriel Poveda, CEO de Poveda Textil, habló de su empresa, dedicada al diseño, fabricación y comercialización de productos textiles destinados al calzado, marroquinería y otras industrias afines. Su filosofía se basa en el desarrollo sostenible respetando el medio ambiente, cumpliendo con los estándares sociales, de salud y de seguridad en la empresa.
Así, explicó cómo las compañías clientes de la firma piden, entre un 60% y un 70% materiales reciclados orgánicos para artículos sostenibles. La compañía de Poveda cuenta con varios sellos para garantizar el uso de estos materiales sostenibles. Por ejemplo el GOTS con un 100% de algodón orgánico, el OCS o el global Recycled Standard, con el que certifican el uso de algodón, poliamida -para licras- y polester.
En el caso de la firma Poveda Textil, el poliester proviene de envases PET, en su gran mayoría, botellas de plástico. «Aporta un poliester de gran calidad y con valores añadidos como la impresión digital, la sublimación y rapidez». El modo que tienen para garantizar el uso de materiales reciclados u orgánicos es el certificado de trazabilidad.
En la empresa han incorporado la marca Seaqual: trabaja con plásticos que se recogen del mar Mediterráneo. A ellos les interesa el PET de las botellas, principalmente.Asimismo, como cada vez se demandan más productos veganos, -en especail clientes alemanes-, Inescop les aporta un sello para certificar que sus productos no cuentan con ningún componente que proviene de animales a través de radioscopia de materiales.
El compromiso de la empresa era ser de emisión 0 en 2021, pero por la covid-19 alargan su objetivo en 2022. Llevan tres años midiendo la huella de carbono y comenzaron a reducirla entonces. El Gobierno central aporta certificados al reducir esa huella. Además, la empresa, para compensar la cantidad de CO2 que aún emite, compra al Gobierno toneladas de oxígeno para compensar. Esto se traduce en proyectos de forestación y reforestación de bosques en España. El objetivo global de la firma: conseguir una gestión sostenible. «Tenemos un compromiso grande con el futuro de siguientes generaciones, el deterioro del planeta es exponencial», concluye Gabriel Poveda.
Por su parte, la coordinadora de I+D en Inescop, Paqui Arán, donde trabaja para proporcionar servicios tecnológicos, transferir conocimientos e investigar sobre temas de interés general para el sector del calzado, habló de la innovación en la industria y de sus retos y oportunidades.
Para la Unión Europea, el futuro industrial pasa por la digitalización y por el compromiso ecológico y sostenible. Por eso hace Arán hincapié en que la industria del calzado y la moda están en transición hacia una neutralidad climática y a un liderazgo digital.
En cuanto al reto digital, está el de conocer mejor al cliente y sus expectativas, «porque es un actor diferencial, hay qué saber qué quiere para ofrecérselo». Además, en los procesos existe el reto de optimizar para lograr la eficiencia. «No importará quien fabrique más, sino quien lo haga de forma más eficiente, con tecnología que apoye esa parte. Aquí está la oportunidad de probar nuevos modelos de negocio que permitan convertir productos en servicios», mantiene Arán.
Otra de las claves pasa por desarrollar nuevos talentos humanos en la empresa, que o se puedan automatizar. «Será el verdadero tesoro» para las firmas. También apuesta por alianzas y centros de investigación como universidades o centros tecnológicos.
Con la covid-19, con menos producción, actividad y ventas, la responsable de I+D de Inescopapela a la resiliencia empresarial y a escuchar los cambios de hábito del consumidor, que ahora apuesta por productos más sostenibles y fabricados en el país o localmente.
Como oportunidades apunta a trabajar en materiales avanzados, que ofrezcan nuevas prestaciones, por apostar por la salud y el confort (por ejemplo, con personalización del producto o la aplicación de IA para generar hormas para cada cliente) o;la fabricación avanzada, pasando por el uso de CAD, cloud, digitalización, impresión 3d, robótica, IoT o el ecodiseño. La sostenibilidad pasa por revisar todo el ciclo de vida del producto y mejorar desde el packaging a los componentes, fase de uso, fin de vida útil y el peso de la huella de carbono.
3DFils es una startup dedicada al desarrollo, fabricación y venta de materiales para impresión 3D que busca convertir la fabricación aditiva en una realidad industrial. Desarrollan materiales con características particulares, ya sea de adhesión o dureza. Su objetivo es crear productos capaces de satisfacer las demandas de la industria en esta nueva realidad productiva.
Tienen experiencia en aplicaciones para impresión 3D en textil y calzado. Según Pablo Valero, COO de 3D Fils, cada vez se usa más impresión 3D en industrias por varios motivos: se reducen gastos, sobre todo en prototipado y también tiempo de producción. También permite una alta personalización del producto y ahorro en transporte de mercancías (porque el prototipo a imprimir se puede enviar en formato digital a cualquier proveedor de otra parte del mundo ahorrando envíos físicos).
Valero asegura que en el mundo textil se empiezan a digitalizar procesos, pero donde más aplicaciones tiene la impresión 3D es en el calzado, sobre todo en la fabricación de suelas. El prototipado de suelas y hormas es más rápido y permite hacer cambios de forma muy rápida, solo cambiando el modelo en el ordenador. Aporta, además, flexibilidad al diseño de calzado. El reto más grande ahora, según Valero, es el humano. Encontrar a fábricas con personal apto y que confíe en la tecnología de fabricación aditiva.
Fuente: Valencia Plaza