Hace años recibió otros nombres, verde botella, verde esmeralda, verde cata y resulta ser este mismo color solo que ha cambiado su nomenclatura a pesar de conservar el mismo matiz.
Como ya venimos viendo en moda, todo vuelve, y este color no es la excepción ya que llega para integrarse dentro de una paleta estival que promete ser una oda a la alegría.
El verde es un color que nunca se va de las pasarelas. Puede mutar, variar su tono e incluso reinventarse pero nunca deja las calles ni las vidrieras en alguna de sus formas. Es que si pensamos en naturaleza, vida, alegría, es inevitable traer a la imaginación algún tono de este noble color.
El verano próximo muchas casas de moda han optado por mezclar varias tonalidades de verdes en un mismo estampado o outfit, y a la vez, siguiendo las coloridas composiciones de la propia naturaleza, lo han presentado junto con amarillo, rosa, lila, negro y blanco.
De todas las opciones disponibles me declaró fan de la dupla que forma con el fucsia o rosado.
Un color lleno de vida que junto al azul, al gris y al negro se convierte en una apuesta soberbia, mientras que unido a la paleta cálida se roba todas las miradas.
De esta tendencia ya han hablado muchísimo, pero a medida que se acercan los meses de verano quería dejarles este post especialmente a aquellas que al igual que yo, se emocionan con la planificación del guardarropas de la temporada siguiente.
Fuente: Buho Moda para Indumentaria Online