Los informáticos de la Universidad de Saarland están demostrando cómo se pueden producir “textiles electrónicos” con relativa facilidad, incorporando funciones interactivas directamente en las fibras de los textiles en lugar de simplemente unirles componentes electrónicos.
Los enfoques previos a la producción de estos textiles son complejos e influyen en la comodidad de uso del material. El método desarrollado por el equipo permite que los textiles y la ropa se conviertan en textiles electrónicos en una etapa posterior sin afectar sus propiedades de uso originales: permanecen delgados, elásticos y flexibles. Esto les permite experimentar de forma rápida y diferente con nuevas formas de textiles electrónicos e integrarlos en dispositivos informáticos.
Los investigadores utilizan el proceso de polimerización in situ. Las propiedades eléctricas se “tiñen” en el tejido: un tejido se expone a una reacción química en un baño de agua, llamado polimerización, que lo hace eléctricamente conductor y sensible a la presión y expansión, lo que le confiere propiedades digamos piezorresistivo. “Coloreando” sólo determinadas zonas de un tejido o polimerizando hilos individuales, los especialistas en TI de Saarbrücken pueden producir tejidos electrónicos a medida. Durante sus pruebas, los investigadores produjeron guantes capaces de registrar digitalmente los movimientos de las manos, una cremallera que transmite diferentes tensiones según el grado de apertura y bandas deportivas que se convierten en un elemento de control adjunto al cuerpo.
Los materiales distintos de los textiles también se pueden tratar con el proceso. La artista parisina Audrey Briot elaboró un vestido de noche con plumas sensibles al tacto que generan sonido a través de una computadora cuando las tocas. Ella polimerizó los resortes utilizando el método desarrollado por científicos informáticos en Saarbrücken. El vestido fue nominado para el premio STARTS de la Comisión Europea.
Fuente: Expotextil news